Promoción de educación, capacitación laboral, empoderamiento y sanación de traumas como estrategias contra racismo y violencia contra la mujer
Una puerta para mujeres sobrevivientes de violencia - promoción de educación, capacitación laboral, empoderamiento y sanación de traumas como estrategias contra racismo y violencia contra la mujer
El consorcio MAIS / MIRIAM apoyará a mujeres jóvenes residentes en áreas marginales de la Ciudad Capital, en su mayoría mujeres indígenas, que han sufrido actos de violencia intrafamilar y/o sexual, para salir del círculo vicioso de pobreza y violencia, definiendo desde ellas mismas nuevos proyectos de vida que garanticen el desarrollo personal y familiar con dignidad y seguridad.
La asociación “Proyecto MIRIAM para la Promoción Intelectual de la Mujer” tiene una trayectoria de 24 años de trabajar a favor de la mujer nicaragüense y guatemalteca y tiene personería jurídica en Guatemala, Nicaragua, Austria y Suiza. MIRIAM Guatemala se fundó en el año 1996 para facilitar el acceso a la universidad a las mujeres guatemaltecas, en especial a mujeres indígenas y en todos estos años ha logrado perfilarse como organización especializada en el ámbito de promoción de la mujer indígena, en temas relativos a educación, formación técnica, derechos de la mujer, equidad de género y contra violencia intrafamiliar.
En coordinación con: Clínica 21 contra Violencia Sexual del Ministerio de Salud Pública y Asistencia Social, Fundación Sobrevivientes, Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado de Guatemala
Duración: 3 años, del 1 de febrero del 2015 al 31 de enero del 2018
El presente proyecto consiste en tres componentes principales y una componente subsidiaria destinada a fortalecer los componentes centrales:
En el componente 1 “Educación – Formación” se dará apoyo para educación formal (primaria / secundaria) y capacitación laboral, mejorando sus oportunidades para empleabilidad y actividades emprendedoras, sentando de esta manera las bases para su autonomía económica, la cual es requisito fundamental para su autonomía personal, social y política.
En el componente 2 “procesos de formación y empoderamiento” se reforzarán el conocimiento de las sobrevivientes sobres sus derechos y los instrumentos de su defensa. El fortalecimiento de su empoderamiento, autoestima y identidad cultural son importantes áreas de trabajo. En el marco de la construcción de proyectos de vida, se analizarán en colectivo las proyecciones al futuro, se construirán objetivos y metas individuales y se discutirá cómo lograrlos. Las becadas recibirán apoyo en la formulación de curricula vitae, entrevistas laborales, negociación de condiciones de trabajo y búsqueda de oportunidades laborales y de actividades emprendedoras.
En el componente 3 “sanación de traumas y talleres de prevención de violencia” se trabajará de manera individual y colectiva la superación de experiencias traumáticas de las sobrevivientes con una metodología elaborada desde la cultura maya por mujeres mayas. Los talleres de sanación de traumas retoman elementos de la espiritualidad maya y recalcan la importancia de la identidad cultural, para la definición y desarrollo de la identidad personal. . El punto de salida es que la sanación de las propias heridas es indispensable para poder ayudara a otros/as, pero la ayuda a otras mujeres también ayuda a sanar las heridas personales. Por esta razón las sobrevivientes, con el apoyo de promotoras universitarias, realizan talleres de prevención de violencia en su entorno social.
CONTEXTO
Los cinco países en el mundo que sufren de la mayor tasa de asesinatos de mujeres son, en orden descendiente: El Salvador (con una tasa de 12 femicidios por 100,000 habitantes), Jamaica (10.8), Guatemala (9.7), África del Sur (9.6) y la federación Rusa (9.2). Estos asesinatos se califican de femicidios o feminicidios por acontecen en un contexto de violencia de género y se caracterizan de por un desprecio especial hacia las mujeres y por una saña y violencia extrema. En Guatemala fueron asesinados en el año 2008 – 687 mujeres, 2009 – 720 mujeres, 2010 – 695 mujeres, 2011 – 631 mujeres y 2012 – 638 mujeres.
También la violencia intrafamiliar es un flagelo nacional y durante el periodo 2008-2011 han sido afectadas 226,256 mujeres incluyendo 12,658 niñas por este tipo de violencia. Las cifras de víctimas ponen de manifiesto la desigualdad que las mujeres continúan sufriendo en Guatemala Según un estudio comparativo de la Organización Panamericana de Salud del año 2012, en Guatemala 24.5% reportaron violencia física de su pareja alguna vez, de las cuales 17.7% reportaron actos de violencia severa.
Sólo el departamento de Guatemala reportó 21.356 denuncias de violencia intrafamiliar en el año 2010, constituyendo un 33.6% del total de denuncias que a nivel nacional se han recibido. La violencia que afecta a las mujeres suele darse en los ámbitos familiares, comunitarios y en su relación con las instituciones del Estado que se expresa en violencia física, sexual, emocional, o a su patrimonio. Las mujeres rurales, indígenas y de sectores urbanos marginales constituyen una población especialmente vulnerable por sus condiciones de pobreza, exclusión social y étnica.
No solamente preocupan los altos índices de violencia, pero también la impunidad la cual es consecuencia de un sistema de justicia ineficiente por el insuficiente financiamiento y los altos niveles de corrupción. La Coordinadora 25 de noviembre denunció que en el 2011 se registraron 20389 casos de violencia física, sexual, psicológica, económica y de femicidio, sin embargo, de los casos que llegaron a los tribunales de justicia, sólo 592 terminaron en una sentencia condenatoria, lo que representó el 2,9 %. Bajo la dirección de la Fiscal General Claudia Paz y Paz, el Ministerio Público ha logrado aumentar las sentencias condenatorias y se han instalado nuevos juzgados especializados en femicidio y violencia contra la mujer, pero todavía hace falta mucho para garantizar una vida sin violencia a todas las mujeres guatemaltecas.
OBJETIVOS
Que las mujeres sobrevivientes de violencia logren construir el proyecto de su vida con una estrategia sincronizada entre educación formal y capacitación laboral y procesos empoderamiento personal así como sanación con pertinencia cultural. Especificamente, que las mujeres jóvenes sobrevivientes de violencia fortalezcan su autonomía económica mediante un proceso de educación formal y capacitación técnica-laboral que facilite el emprendedurismo y la empleabilidad en igualdad. A su vez, que estas mujeres, junto a promotoras universitarias, sean capaces de crear grupos de autoayuda y promover los derechos de las mujeres.
ACTIVIDADES
- Otorgar apoyo a 20 mujeres jóvenes de escasos recursos, sobrevivientes de violencia, para cursar primaria, secundaria y cursos de capacitación técnica-laboral
- Realizar tutorías (reforzamiento escolar) de parte de las becadas universitarias de MIRIAM
- Organizar dos talleres para madres y padres de familia para fortalecer su apoyo hacia los estudios, capacitaciones y la atención psicológica de sus hijas
- Acompañar a las mujeres becadas para darles apoyo en problemas específicos y brindarles seguimiento a sus estudios y la búsqueda de empleo y el desarrollo emprendedurismo
- Realizar un programa de formación personal que promueva el empoderamiento de las mujeres sobrevivientes y la definición de su proyecto de vida, una vez al mes, impartidas de parte de MIRIAM
- Realizar una reunión de un día completo de intercambio de experiencia entre todas las estudiantes
- Ofrecer asesoría profesional para la planificación y desarrollo de actividades emprendedoras
- Brindar atención psicológica individual por parte de una estudiante universitaria de psicología en el marco de su Ejercicio Profesional Supervisado
- Realizar dos talleres de sanación de traumas con una metodología que se basa en la cosmovisión maya
- Realización de 4 reuniones de los grupos de autoayuda acompañadas por las sobrevivientes de violencia y promotoras universitarias de prevención de violencia contra la mujer
- Realizar reuniones de coordinación interinstitucionales con Fundación Sobrevivientes, Ministerio de Salud Pública, Oficina de Derechos Humanos del Arzobispado de Guatemala, Alianza contra la Violencia Sexual, Coordinadora 8 de Marzo, Coordinadora 25 de Noviembre y otras organizaciones que trabajan el tema de prevención y atención en casos violencia contra la mujer